Existen muchos métodos y consejos para convertir nuestra cocina en un espacio sostenible y respetuoso con el medio ambiente. Lo cierto es que no es tan complicado como parece. En este post vamos a darte una serie de tips de nuestro chef privado en Granada que puedes implementar en tu día a día para ser más sostenible a la hora de cocinar. 

¿Qué significa ser sostenibles en la cocina?

Ser sostenibles no es más que reducir la huella de carbono que generamos de manera individual en nuestro hogar, concretamente en la cocina, uno de los espacios que más contaminan en una vivienda.

Según nuestro chef privado en Granada, para ser sostenibles no es necesario aplicar muchísimos métodos o pautas, lo importante es comenzar por un par e implementarlos en tu rutina. De esta manera, conseguiremos reducir paulatinamente este problema.

1. Compra frutas y verduras de temporada

Debido a nuestro ritmo de vida, a veces es complicado comprar en fruterías, por lo que recurrimos a supermercados y no pensamos mucho acerca de lo que metemos en nuestro carrito. Sin embargo, este pequeño tip puede ser un gesto muy significativo para el medio ambiente.

En la estación actual (invierno) se consumen las siguientes frutas y verduras:

• Frutas: aguacate, caqui, kiwi, limón, naranja y pomelo.

• Verduras: acelga, apio, brócoli, espinaca, nabo, zanahoria, alcachofa, puerro y coliflor.

La selección anterior es un pequeño ejemplo, te animamos a que completes tu lista con muchas otras.

En nuestra Finca, contamos con un huerto en el que recogemos productos que empleamos día a día en nuestra cocina, como aguacate, hierbas aromáticas, mango, limón, etc.

2. Consume local

En la Costa Tropical y la Costa del Sol disponemos de una gran cantidad de mercados en los que podemos encontrar pescado, marisco y carne de la mejor calidad. Además, nuestro chef privado en Granada destaca que apoyar el comercio local que es clave en estos momentos.

Concretamente en Motril, productos como el pulpo, la quisquilla, el aguacate o el mango son los más destacados de la zona. Y que además podéis ver presente en muchas de nuestras creaciones culinarias.

3. No compres en exceso

Las grandes compras para ahorrar tiempo durante la semana en muchas ocasiones supone un desperdicio de producto. Ya que o bien, nos olvidamos de lo que tenemos en la nevera o no nos da tiempo a consumirlo antes de que caduquen. Es por ello que es preferible, comprar fresco y en menos cantidades, que comprar cantidades ingentes de comida para que luego acabe desperdiciándose. 

Lo mismo sucede con las raciones de comida, añade a tu plato la cantidad que creas que puedes comer, porque la mayoría de las veces tendemos a servirnos un gran plato de comida y la mitad de ella se acaba tirando a la basura.

4. Si es posible, ten un pequeño huerto

Si vives en un piso, por ejemplo, tener plantas aromáticas es una muy buena opción. Además de ser muy decorativas, son fáciles de mantener y muy útiles a la hora de dar el toque final a muchos de vuestros platos. Hoy en día podemos encontrar muchas opciones para montar un huerto en casa, como por ejemplo, los huertos verticales. 

Esperamos que estos consejos hayan sido de ayuda y que implementéis alguno de ellos en vuestro día a día.